Se derrumbó la demanda de dólares tras las elecciones

La compra de divisas para ahorro cayó un 95% en dos meses y el Gobierno espera una inflación mensual inferior al 2% desde enero.

Economía14/12/2025SOFIA ZANOTTISOFIA ZANOTTI
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La demanda de dólares para ahorro registró un desplome histórico tras las elecciones, con una caída del 95% en apenas dos meses. Según datos oficiales, pasó de un pico de 4.600 millones de dólares en septiembre a apenas 200 millones en noviembre, reflejando un cambio abrupto en las expectativas del mercado.

El comportamiento del tipo de cambio acompañó este proceso. En un contexto de baja liquidación del sector agropecuario, el dólar se mantuvo estable dentro de las bandas cambiarias, en torno a los 1.460 pesos. Ante este escenario, el Tesoro Nacional comenzó a realizar compras de divisas de manera gradual para evitar una apreciación excesiva del peso.

La información fue presentada por el vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, durante un seminario internacional ante inversores. Allí destacó que, luego de los comicios, se fortaleció la credibilidad en el régimen cambiario vigente y que el fuerte proceso de dolarización previo a las elecciones representó un “shock” de magnitud excepcional.

Werning también defendió la política de acumulación de reservas, señalando que durante los dos años de gestión de Javier Milei se adquirieron cerca de 27.000 millones de dólares, con apoyo del Fondo Monetario Internacional. Ese proceso permitió, además, reducir el stock de deuda en unos 50.000 millones de dólares mediante el pago de obligaciones.

De cara a los próximos meses, se espera que las compras de dólares se aceleren. En una primera etapa lo hará el Tesoro, que necesita afrontar vencimientos por 4.200 millones de dólares en enero. Más adelante, el Banco Central avanzaría con su plan de remonetización de la economía, emitiendo pesos contra la compra de divisas sin esterilización.

La mayor oferta de dólares podría llegar por varios frentes. Por un lado, la cosecha de trigo, que se proyecta récord. Por otro, los más de 5.000 millones de dólares obtenidos por empresas y provincias en colocaciones internacionales recientes, que aún no ingresaron al país.

En paralelo, comenzó a observarse una fuerte baja en las tasas de interés. Los plazos fijos ofrecen rendimientos de entre 21% y 25% anual, mientras que otras tasas de corto plazo, como cauciones y descuentos de cheques, también registraron caídas significativas.

Este escenario alimenta las expectativas de una desaceleración inflacionaria. Tras el 2,5% registrado en noviembre, se espera que la inflación continúe bajando y se ubique por debajo del 2% mensual desde enero. Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central, el índice podría llegar al 1,5% en abril de 2026.

No obstante, persisten señales de alerta en el nivel de actividad. Sectores como el textil, automotriz y metalúrgico muestran caídas interanuales pronunciadas, en un contexto marcado por el aumento de importaciones y el crecimiento del comercio electrónico, que presionan sobre la producción local.

En este marco, desde el Gobierno consideran clave avanzar con la reforma laboral y, posteriormente, la impositiva, con el objetivo de reducir costos y mejorar la competitividad frente a un escenario de mayor apertura económica.

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