Diputados debaten proyectos sobre violencia política contra Cristina Kirchner y periodistas

Este martes a las 15.30 en la Sala 5 del Anexo de la Cámara de Diputados se llevará a cabo una reunión convocada por la diputada nacional Mónica Macha, presidenta de la Comisión de Mujeres y Diversidad, con el objetivo de debatir diversas expresiones de violencia política, principalmente dirigidas hacia la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, militantes kirchneristas y periodistas críticas del gobierno nacional.

Durante el encuentro se tratarán cuatro ejes principales: la proscripción a Cristina Fernández de Kirchner, el ataque a periodistas, la persecución política y el rol de las organizaciones sociales. Además de Macha, participarán legisladores de Unión por la Patria, el Frente de Izquierda y Encuentro Federal. En representación de este último, estará presente el diputado Esteban Paulón, quien sufrió ataques homofóbicos recientemente, tema también incorporado al temario.

Entre los invitados se destacan las periodistas Julia Mengolini, Nancy Pazos y María O'Donnell, el ex juez Raúl Zaffaroni, la doctora Marisa Herrera y la socióloga Luci Cavallero. También se espera la asistencia de familiares de militantes detenidas por un acto de vandalismo en el domicilio del diputado libertario José Luis Espert.

Macha presentó dos proyectos: uno para repudiar las detenciones arbitrarias de militantes, entre ellas Alesia Abaigar, y otro para denunciar una campaña de difamación contra Mengolini. En el caso de Abaigar, la legisladora cuestionó la decisión de la jueza Sandra Arroyo Salgado de mantener la prisión preventiva, aludiendo a un uso político del proceso judicial.

Sobre Mengolini, Macha apuntó contra “una operación articulada en redes sociales”, con noticias falsas y violencia digital impulsada por cuentas afines al gobierno. En su proyecto, detalla que el propio presidente Javier Milei habría compartido más de 80 publicaciones sobre la periodista, incluyendo imágenes falsas generadas con inteligencia artificial.

Desde el kirchnerismo sostienen que estas acciones configuran un escenario de disciplinamiento político y simbólico, impulsado desde el oficialismo y el Poder Judicial, contra mujeres y referentes del movimiento nacional y popular.