Un hombre de Córdoba fue impedido de ingresar a la cancha de Belgrano por no pagar la cuota alimentaria de su hijo adolescente. La deuda lleva incumplida tres años y, como parte de las medidas cautelares, también le prohibieron la renovación del carnet de socio del club. Además, el hombre no podrá salir del país.

El hombre fue embargado en distintas ocasiones, pero decidió renunciar a su trabajo en blanco y así esquivar las medidas restrictivas. La jueza de la causa, María Constanza Fribank, determinó que el hombre está ejerciendo violencia económica por razón del género, pues no sólo está perjudicando a la madre de su hijo, sino también a su propio hijo.

Esta es una medida ejemplar que busca garantizar el derecho de los niños a recibir alimentos de parte de sus padres. Es importante que se tomen medidas para prevenir y sancionar la violencia económica, que es una forma de violencia de género que puede tener un impacto devastador en la vida de las mujeres y sus hijos.

El caso del hombre de Córdoba es uno de los muchos casos de violencia económica que se registran en Argentina. Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de las Mujeres, en 2019, el 40% de las mujeres que denunciaron violencia de género también denunciaron violencia económica.

La violencia económica es una forma de violencia de género que se ejerce a través del control económico de la pareja o expareja. Puede manifestarse de diversas formas, como la retención de dinero, la prohibición de trabajar o estudiar, el sabotaje del trabajo o los estudios, o la limitación del acceso a los recursos económicos.

La violencia económica tiene un impacto devastador en la vida de las mujeres y sus hijos. Puede provocar pobreza, inseguridad alimentaria, deserción escolar, aislamiento social y problemas de salud mental.