Esta semana comenzaron los controles por exceso de velocidad mediante cinemómetros móviles en la provincia, que operarán directamente con el Sistema de Juzgamiento y Administración de Infracciones (SIJAI) a través de los PDA (Personal Digital Assistant), una especie de teléfono inteligente con el que la infracción se puede imprimir en el acto, lo que reemplaza al talonario que completaba el policía vial. Al respecto se refirió el subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (ASPV), Osvaldo Aymo: “Lo fundamental que tienen que saber los conductores es que las velocidades se disponen según sean rutas nacionales o provinciales. Por ejemplo, en la circunvalación de Rosario, que comprende 32 km, la velocidad máxima es de 100 km/h. Los conductores tienen que exigir las señales de tránsito para que puedan observarlas”.

A su vez, indicó que “el Estado tiene que exigir que se respeten las velocidades máximas permitidas. En ninguna parte del mundo acatamos las normas porque somos buenos, sino porque hay controles”.

Sobre los riesgos de accidentes, Aymo dijo: “Las distracciones por el uso del celular son uno de los factores de riesgo más importantes en los accidentes viales. Es más, en junio de 2019 la Universidad Europea de Madrid demostró que el uso del celular había sido la causa de riesgo más grande por encima del alcohol y el exceso de velocidad”.

Controles de alcoholemia

Aymo precisó que en 2022 la APSV realizó 222.000 test de alcoholemia en las rutas de la provincia, superando los 96.000 de 2021 y los 26.000 de 2019.