Pullaro en el juicio a exjefes policiales: “No toleramos la corrupción institucional”

La primera semana del juicio oral contra los exjefes de Policía de Santa Fe, Omar Odriozola y Rafael Grau, cerró con la declaración del gobernador Maximiliano Pullaro, quien fue el primer testigo del proceso. Ambos excomisarios están acusados de liderar una asociación ilícita dedicada a desviar fondos públicos mediante reparaciones irregulares de móviles policiales entre 2015 y 2016.

Pullaro, quien era ministro de Seguridad cuando denunció el caso en mayo de 2016, prestó testimonio ante el tribunal compuesto por los jueces Celeste Minniti, Cecilia Labanca y Sebastián Szeifert. Relató que la investigación se originó a partir de un anónimo recibido en su cartera, con datos precisos sobre corrupción institucional en torno a reparaciones ficticias.

“Yo tenía que hacer la denuncia. La firmé con mi nombre porque era un hecho de una enorme gravedad institucional”, declaró. Y recordó que tomó conocimiento de la situación a solo cinco meses de asumir su cargo.

Además de responder las preguntas en sala, Pullaro se dirigió a la prensa y a los integrantes de la fuerza: “La gran mayoría de la policía santafesina es honesta y trabajadora. Pero el que comete un delito, lo paga”. También afirmó que se está actuando del mismo modo frente a nuevas investigaciones internas como la causa por robo de combustible en Rosario, que involucra a 13 policías, incluyendo cuatro comisarios.

El gobernador subrayó que no se puede permitir “ningún tipo de corrupción” si se pretende avanzar hacia mejores instituciones democráticas. “Podría haberme hecho el zonzo y tirar el anónimo, pero elegí hacer lo correcto”, dijo, destacando que el mensaje a la tropa es de “apoyo profundo” para quienes cumplen con su deber.

Pullaro cerró su intervención asegurando que, bajo su gestión, todos los funcionarios tienen la obligación de denunciar irregularidades. “No hay lugar para hacerse el boludo”, sentenció.