Chocaron la Ferrari de Lando Norris en Mónaco: así quedó y los detalles del accidente

Un accidente en las cercanías de Mónaco captó la atención en redes sociales al involucrar una Ferrari F40, propiedad de Lando Norris, piloto de la Fórmula 1. Este monoplaza, valuado en cerca de 2,5 millones de euros, registró daños leves en la parte trasera izquierda y no era conducido por el británico en el momento del impacto.

Gasly, Doohan y más: quiénes conforman el equipo de Alpine junto a Colapinto, uno por uno

Según información de Autosport, el hecho ocurrió mientras el vehículo era capturado en movimiento. Durante la grabación, el conductor, cuya identidad no fue revelada, perdió el control tras acelerar y desestabilizar el eje trasero. Esto provocó que el auto derrapara y colisionara contra el guardarraíl. A pesar del golpe, los daños quedaron restringidos a un sector limitado de la carrocería, aunque la exclusividad del coche y su vínculo con Norris despertaron un gran interés.

El piloto al mando del Ferrari logró recuperar el control y condujo el vehículo unos metros hasta estacionarlo en un lugar seguro. En este proceso, cruzó al carril contrario en una zona de línea continua, un movimiento que podría ser criticado por cuestiones de seguridad vial.

La Ferrari F40, producido entre 1987 y 1992 para conmemorar los 40 años de la marca, es uno de los deportivos más emblemáticos de la historia. Equipado con un motor V8 biturbo de 2.9 litros y una potencia de 478 caballos de fuerza, su diseño se centra en el rendimiento puro. Carece de sistemas como control de estabilidad o tracción, lo que hace que su conducción sea exigente, especialmente en situaciones que ponen a prueba su potencia.

Estas características complican su manejo en circunstancias desfavorables. La entrada brusca de los turbos puede generar un comportamiento impredecible, lo que podría haber influido en este incidente.

Una particularidad del auto de Norris es que no conserva las llantas originales, lo que lo diferencia de otros modelos del mismo tipo en circulación en Mónaco. Este auto ya había sido visto en las calles de Montecarlo, incluso tras el Gran Premio de Singapur de 2023, donde Norris celebró su podio en la F1.

El joven piloto de McLaren demostró en varias ocasiones su afición por los autos clásicos, reflejada en la adquisición de este modelo icónico. Su residencia en Mónaco le permite disfrutar de una de las colecciones de autos más exclusivas del mundo.