De héroe a villano, el ocaso de un ícono en Boca Juniors

La reciente imagen de Sergio Romero, arquero y capitán de Boca Juniors, está lejos de ser la del héroe que llevó al equipo a la gloria en 2023. En un contexto crítico, su reacción a los insultos de plateístas tras la derrota ante River Plate ha desencadenado una serie de cuestionamientos sobre su futuro en el club.

Romero, quien brilló en la Copa Libertadores del año pasado, se erigió como figura fundamental al atajar penales en momentos decisivos. Sin embargo, el reciente conflicto ha puesto su trayectoria en la cuerda floja. La derrota ante River, que dejó al Xeneize con una amarga sensación de fracaso, marcó un antes y un después en la percepción pública sobre el arquero.

A los 37 años, Romero ha visto disminuir su rendimiento. La falta de efectividad en los penales, que lo había consagrado el año anterior, se ha vuelto evidente en las recientes eliminaciones de Copa de la Liga y Copa Sudamericana. Sus errores en partidos clave, sumados a su reciente confrontación, han llevado a la dirigencia a sancionarlo con dos partidos fuera de la titularidad.

Durante su ausencia, el juvenil Leandro Brey tendrá la oportunidad de demostrar su valía bajo los tres palos. Si Brey brilla, el retorno de Romero al arco podría ser incierto, lo que acentúa la sensación de que su ciclo en Boca Juniors podría estar llegando a su fin.