Los perros de Chernóbil desarrollaron más de 390 genes diferentes y muestran una sorprendente resistencia al cáncer

Un nuevo estudio científico volvió a encender el interés mundial sobre la fauna que habita la zona de exclusión de Chernóbil. Esta vez, la atención está puesta en los perros que viven alrededor de la central nuclear, cuyo ADN revela que la radiación, el aislamiento y la selección natural produjeron una población genéticamente única.

Internacionales25/11/2025LORENA ACOSTALORENA ACOSTA
Y7XJN5FT4ZGH3JBVMVZLTVDG6U

Un ecosistema marcado por la catástrofe
Tras la explosión del reactor 4 en 1986, la región quedó contaminada con cesio-137, yodo-131 y otros radionúclidos. Miles de habitantes abandonaron sus hogares y muchos dejaron atrás a sus mascotas. Hoy, esos animales —y sus descendientes— conforman una población que aprendió a sobrevivir en un ambiente extremo.

Un equipo internacional liderado por Gabriella J. Spatola y Timothy A. Mousseau analizó la genética de 302 perros entre 2017 y 2019, tomando muestras en tres puntos clave:

La central nuclear
La ciudad de Chernóbil, a 15 km
Slavutych, a 45 km
El trabajo fue publicado en Science Advances.

Tres poblaciones distintas y un ADN que se transformó
El análisis de polimorfismos (SNP) permitió identificar tres grupos genéticos bien diferenciados.

Los perros que viven junto al reactor presentan muy baja diversidad genética, probablemente por un “cuello de botella” poblacional después del desastre.
Los animales de la ciudad de Chernóbil son los más diversos.
Los de Slavutych muestran influencia reciente de razas domésticas como labrador o yorkshire terrier.
En total, los científicos detectaron más de 390 regiones genéticas distintas, muchas vinculadas a reparación del ADN y resistencia biológica.

Una resistencia inesperada: casi inmunes al cáncer
Uno de los hallazgos más llamativos es la baja incidencia de cáncer en estos perros, pese a la exposición prolongada a niveles de radiación superiores a los permitidos para humanos.

Los investigadores remarcan que:

No observaron mutaciones típicas de daño directo por radiación.
Los cambios parecen surgir por selección natural y aislamiento, más que por mutación inducida.
Algo similar ocurre con los lobos de Chernóbil, que ya habían mostrado una resistencia superior al cáncer y un sistema inmunológico “reforzado”.
No se habla de inmunidad absoluta, pero sí de una capacidad de resistencia muy superior a la de caninos comunes.

Un modelo para la ciencia del futuro
Los perros de Chernóbil se convirtieron en un modelo único para estudiar:

Cómo se adaptan los mamíferos a ambientes tóxicos.
Procesos de evolución acelerada.
Respuestas del sistema inmunitario bajo estrés ambiental prolongado.
Implicancias para medicina, oncología y misiones espaciales de larga duración.
Los próximos estudios evaluarán efectos epigenéticos —cambios en la expresión del ADN sin modificar su secuencia— y se ampliarán a otras especies de la zona.

Te puede interesar
Lo más visto
santiago-ascacibar-estudiantes-la-plata-capitan-formacion-scaled

River avanza por Santiago Ascacíbar para 2026

GASTON PAROLA
Deportes03/12/2025

El club de Núñez inició gestiones formales por el capitán de Estudiantes, en un mercado que promete movimientos fuertes. El mediocampista también analiza una propuesta del fútbol brasileño.