Ningún Semifinalista Continental Logra Ganar: La Maldición Post-Copa Afecta a Todos

El fin de semana posterior a la vibrante clasificación a las semifinales de la Copa Libertadores y Sudamericana resultó nefasto para los ocho equipos que aún siguen en carrera. River Plate, tras vencer a Colo-Colo y avanzar a la siguiente fase, cayó inesperadamente por 1-0 ante Talleres de Córdoba en el Estadio Monumental. La derrota marcó el primer revés del nuevo ciclo de Marcelo Gallardo, que busca devolver la gloria al club desde su regreso.

El desgaste físico y emocional de haber enfrentado partidos "a todo o nada" parece haber afectado no solo a River, sino también a los otros semifinalistas. Atlético Mineiro, rival del conjunto Millonario en la próxima instancia de la Libertadores, también sufrió una derrota, esta vez por 2-1 ante Palmeiras en calidad de visitante, demostrando que el desgaste no conoce fronteras.

Por su parte, Botafogo empató sin goles ante Gremio en el Brasileirao, mientras que Peñarol, próximo contrincante en la copa, no logró superar a Racing de Montevideo y también vendió un 0-0 en su partido liguero. La coincidencia de resultados sugiere un patrón claro: la dificultad de mantener el nivel tras encuentros de alta intensidad.

En la Sudamericana, la situación no fue diferente. Los cuatro equipos aún en competencia también dejaron puntos en el camino, en una jornada que evidenció el difícil equilibrio entre competir a nivel local e internacional. Los estrategas ahora deberán recalcular sus planos, buscando evitar que estos tropiezos impacten negativamente en su rendimiento en la fase decisiva de los torneos continentales.

La historia reciente recuerda que estos bajos no son definitivos, y que, por el contrario, equipos como River y Mineiro suelen transformarlos en momentos de aprendizaje que potencian sus posibilidades en la grande competencia. Sin embargo, la presión aumenta, y las semifinales prometen emociones aún mayores tras un fin de semana que mostró la vulnerabilidad de los grandes.