"Incidentes y gas pimienta frente al Congreso: organizaciones sociales cortaron el tránsito y Gendarmería activó el protocolo":

El Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, había preparado un protocolo antipiquetes y un megaoperativo de seguridad para controlar la movilización convocada por la izquierda. Decenas de efectivos de diversas fuerzas de seguridad permanecen en las inmediaciones del Congreso para evitar incidentes durante la protesta.

País01/02/2024Novedades del  SurNovedades del Sur
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En una tarde marcada por la tensión, organizaciones sociales llevaron a cabo una protesta frente al Congreso de la Nación en rechazo a la Ley Ómnibus que se encuentra en debate en la Cámara de Diputados. La manifestación, que congregó a grupos como el Partido Obrero, el PTS, el MST y el Frente de Izquierda, se intensificó cuando los manifestantes cortaron la Av. Rivadavia en plena hora pico.

Las fuerzas de seguridad, en un intento de despejar las calles, activaron el protocolo antipiquetes. Sin embargo, la situación se volvió tensa rápidamente, resultando en momentos de violencia. Uno de los manifestantes, identificado como Belliboni, terminó golpeado en el piso, y se reportó la detención de un individuo de nacionalidad chilena en medio de los enfrentamientos.

La Policía Federal y la Gendarmería Nacional formaron una fila para evitar que se cortara el tránsito, logrando liberar un carril de la Av. Rivadavia cerca de las 18 horas. Sin embargo, el tráfico volvió a interrumpirse más tarde.

La situación escaló cuando la policía arrojó gas pimienta sobre los manifestantes, aumentando la tensión en el lugar. Entre los manifestantes se encontraba la legisladora del Frente de Izquierda, Celeste Fierro.

Posteriormente, una columna de Prefectura Naval Argentina equipada con escudos y cascos llegó al lugar, lo que generó nerviosismo tanto entre las fuerzas de seguridad como los manifestantes.

El Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, había preparado un protocolo antipiquetes y un megaoperativo de seguridad para controlar la movilización convocada por la izquierda. Decenas de efectivos de diversas fuerzas de seguridad permanecen en las inmediaciones del Congreso para evitar incidentes durante la protesta.

Carros hidrantes y numerosos agentes de la Gendarmería y la Policía Federal rodean el perímetro que protege los accesos al Parlamento, estableciendo un extenso operativo delimitado por vallas que separan a los manifestantes del edificio del Congreso.

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