El consumo de carne vacuna en Argentina cae un 12% en un año: ¿El fin del asado para muchos?

Según un informe de la CICCRA, las políticas de ajuste y la crisis económica han reducido drásticamente el consumo interno de carne vacuna, alcanzando niveles históricos bajos.

Economía24 de diciembre de 2024SOFIA ZANOTTISOFIA ZANOTTI
asado

El impacto de las políticas económicas del gobierno de Javier Milei sigue afectando la economía de los argentinos, y el sector de la carne vacuna no es ajeno a esta realidad. De acuerdo con los datos proporcionados este lunes por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y derivados de la República Argentina (CICCRA), en el periodo enero-noviembre de 2024 el consumo de carne vacuna cayó un 12% en comparación con el mismo período del año anterior, lo que marca el nivel más bajo en los últimos 22 años.

imagepngANSES confirma aumento de la AUH y bono extraordinario para enero 2025

El consumo per cápita en 2024 se situó en 47,4 kilos por habitante al año, lo que representa una caída de 5,9 kilos respecto a 2023. Además, el promedio móvil de doce meses hasta noviembre alcanzó los 47,0 kg por habitante, lo que equivale a una baja de 6,6 kilos interanuales. Este retroceso en el consumo interno se reflejó también en la disminución de la absorción de carne vacuna en el país, que fue un 10,1% inferior a la del mismo período de 2023.

Por otro lado, las exportaciones de carne vacuna mostraron una tendencia positiva. En octubre de 2024, las ventas externas alcanzaron las 56,2 mil toneladas, lo que representa un aumento del 39,8% en comparación con el mismo mes del año pasado, gracias al aumento de las exportaciones hacia China, Israel y otros países como EE.UU., México y Alemania. No obstante, la caída del consumo interno sigue siendo una preocupación, con la carne como un lujo cada vez más inaccesible para muchos.

En cuanto a la producción, los primeros once meses de 2024 registraron una faena de 12,67 millones de cabezas de ganado, una disminución del 5,7% en comparación con 2023. Esta reducción se debe, en parte, a la sequía que afectó gravemente el sector en 2023, lo que obligó a la venta anticipada de hacienda y redujo el stock de vientres, afectando la producción de terneros.

Te puede interesar
Lo más visto