El Gobierno fijó un techo al dólar oficial: no superará los $1.300

En una jugada clave para frenar la escalada cambiaria, el Gobierno nacional intervino de forma coordinada en los mercados financieros para evitar que el tipo de cambio oficial supere los $1.300. Con ventas masivas de contratos de dólar futuro, suba de tasas en pesos y absorción de liquidez, el Banco Central y el Ministerio de Economía apuntaron a preservar el anclaje inflacionario.

La reacción oficial se dio luego de que el dólar alcanzara brevemente los $1.300 durante la jornada del martes. Sin embargo, hacia el cierre de la rueda, el tipo de cambio se ubicó en $1.280 en el segmento minorista y en $1.260 en el mayorista. Las ventas de futuros superaron los USD 600 millones, y la tasa de interés trepó a casi 39% anual, lo que buscó desalentar la compra de divisas y fortalecer el atractivo de los instrumentos en pesos.

Además, el Tesoro realizó una licitación extraordinaria para absorber pesos y el BCRA volvió a ofrecer pases pasivos para captar el excedente de liquidez bancaria, reinstaurando los pasivos remunerados como herramienta de control monetario.

La intervención dejó al descubierto una nueva estrategia del equipo económico: mantener el tipo de cambio dentro de una banda tácita que evite sobresaltos inflacionarios, especialmente cuando la inflación de julio podría ubicarse por debajo del 2%, según estimaciones privadas.

A su vez, se observa un ajuste del tipo de cambio real del 18% desde abril, lo que mejora la competitividad del sector exportador. No obstante, el panorama no es del todo favorable: se anticipa una merma en la liquidación de divisas del agro y una mayor demanda por importaciones y gastos turísticos de invierno.

El interrogante que queda en el aire es si estas medidas bastarán para contener la presión cambiaria en un contexto externo que se proyecta más desafiante.