En un giro de los acontecimientos relacionados con las recientes amenazas dirigidas al futbolista Ángel Di María, las autoridades anunciaron el hallazgo del automóvil implicado en el incidente. El fiscal a cargo del caso, Pablo Socca, ha emitido órdenes de detención para varios agentes policiales, argumentando que la difusión prematura de pruebas ha obstaculizado significativamente la investigación en curso.

El vehículo en cuestión, un Renault Megane gris, fue descubierto en la madrugada del miércoles en la intersección de las calles 1818 y Espinoza, en la zona oeste de Rosario. Este descubrimiento ha llevado a un desarrollo crucial en el caso, con el fiscal Socca identificando la acción de ciertos miembros de la fuerza policial como contraproducente para la resolución efectiva del asunto.

La emisión de imágenes de las cámaras de seguridad que capturaron los movimientos del automóvil ha sido particularmente señalada como un obstáculo para la investigación en curso. Según informes de Cadena 3, la circulación pública de tales pruebas ha sido considerada como un presunto delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Además, el fiscal Socca ha criticado la decisión del country Funes Hills de divulgar la patente del automóvil en un comunicado público, calificándolo como perjudicial para el caso. Este desarrollo subraya la sensibilidad y la importancia de manejar cuidadosamente la información relacionada con investigaciones en curso, particularmente cuando se trata de casos de alto perfil como este.

A medida que la investigación avanza y se toman medidas legales contra los presuntos implicados, la esposa de Ángel Di María, Jorgelina Cardoso, ha compartido el impacto emocional que estas amenazas han tenido en su familia. Sin embargo, su declaración refleja la gravedad del incidente y la necesidad de un enfoque prudente en la cobertura y divulgación de estos eventos.