La tormenta, acompañada de fuertes ráfagas de viento, afectó a diversas localidades, entre ellas Avellaneda, Reconquista, Galisteo, Sunchales, Eusebia, Ceres, San Cristóbal, Romang, El Sombrerito, Tacural, Vera, entre otras.

Marcos Escajadillo, secretario de Protección Civil provincial, informó que el temporal se desató la noche del jueves y afectó una extensa zona. Localidades como Sunchales, Ceres, Romang, Vera y Reconquista se vieron especialmente afectadas, con videos de árboles siendo sacudidos violentamente y una intensa caída de agua en poco tiempo.

En Ceres, una de las zonas más golpeadas, la tormenta comenzó alrededor de las 22:30, tomando por sorpresa a los residentes y causando voladuras de techos, caídas de árboles y cortes de luz. La corresponsal de AIRE en la zona, Silvina Bessi, describió la situación como desoladora, con la energía eléctrica cortada desde las 11 de la noche y pronósticos de continuas interrupciones.

En Sunchales, vientos huracanados de más de 100 km/h provocaron la caída de más de 100 árboles y cables de energía eléctrica y telefónica. Marina Ferrero, periodista local, relató que las ráfagas causaron voladuras de techos y daños en la infraestructura de predios agroindustriales.

San Cristóbal también sufrió los embates del temporal, con ráfagas de viento que alcanzaron los 87 km/h y provocaron el derrumbe de parte del techo del hospital local. Aunque se reportaron árboles y postes de luz caídos, así como calles interrumpidas, el senador Felipe Michlig aseguró que no se registraron personas heridas, aunque algunas familias fueron reubicadas debido a la voladura de techos.

A pesar de la magnitud de la tormenta, la rápida respuesta de los servicios de emergencia y la colaboración de la comunidad contribuyeron a evitar tragedias personales. Las autoridades continúan evaluando los daños y brindando asistencia a las áreas afectadas.