La Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), gremio que nuclea a docentes de escuelas públicas, reiteró el pedido una audiencia al ministro de Seguridad, Claudio Brilloni, para tratar los casos de violencia contra distintas escuelas de Rosario. El Sindicato de Docentes Particulares (Sadop) ya había hecho el mismo reclamo este jueves en carácter de "urgente".

El secretario general del sindicato a nivel provincial, Paulo Juncos, aseguró que las autoridades del gobierno de Santa Fe “no dimensionan la magnitud del problema” y teme que la “la situación se expanda las ciudades cercanas a Rosario”.

“Ya es viernes, así que ya esperamos tener una reunión la semana próxima, porque la situación es muy grave en muchas zonas de Rosario. Pero es una preocupación provincial y queremos hacer un planteo integral sobre las problemáticas de seguridad en las escuelas”, añadió.

Juncos afirmó que la problemática de violencia e inseguridad “no se soluciona con un patrullaje en situaciones determinadas. Debe haber una intervención integral del estado. El avance del narcotráfico en comunidades de Rosario no requiere de una presencia momentánea de la policía, sino de mayor acción del Estado con una política más amplia”.

“Estamos preocupados por el riesgo que corren los y las docentes en las escuelas, pero también por los alumnos y las comunidades en general. Las autoridades no entienden la dimensión y la gravedad del problema, las respuestas deben llegar con rapidez y contundencia. Ante la falta de eso, las organizaciones criminales avanzan en las comunidades y hay miles de docentes que trabajan en ese contexto”, destacó Juncos.

Asimismo, sostuvo: “Nosotros percibimos lo mismo que percibe la mayoría de la sociedad. Hay un descontento muy grande con la clase política. Todo el mundo advierte la gravedad de la situación y no vemos un abordaje que tenga que ver con las necesidades que se requieren para resolver este problema. En Rosario hay un desmadre de situación terrible. Y hasta tenés la sensación de que se minimizan algunas situaciones. El gobernador dijo: nos usan como mensajeros. ¿Qué estamos esperando?” .

Por último, alertó que la violencia “no va a quedar solamente en Rosario", y explicó: "Hay departamentos cercanos a Rosario, como San Lorenzo, Constitución, que empezaron a tener situaciones de violencia similares, no de la gravedad de Rosario, pero todo el mundo ve que esto no va a quedar circunscripto a la Circunvalación de Rosario. Si subestimamos eso el problema será más grande”.