Lucila declaró ante la fiscal de la causa, María José Basiglio, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Violencia de Género de Pilar, en donde aseguró que el viernes por la noche (el día antes del femicidio) Saravia no durmió en la vivienda matrimonial, sino que se fue a otra casa a raíz de una discusión con su esposo.

En la misma línea, las dos empleadas domésticas relataron que el sábado por la mañana el empresario desayunó solo en su habitación y que a su esposa no la habían visto hasta que regresó al mediodía.

Además, otros de los hijos del matrimonio, Germán, Patricia y Juan Neuss, también declararon ante la fiscal, pero sus testimonios no se difundieron.

La funcionaria judicial pudo verificar que antes de matar a su esposa, Neuss envió dos mensajes de texto a dos amigos por su cumpleaños a las 12:36 y 12:37.

A las 12:59 se registró el primer llamado al 911 para reportar lo ocurrido. Una fuente de la investigación indicó que "todo sucedió en esos 22 minutos que pasaron desde que mandó los mensajes para saludar a los amigos hasta el llamado al 911".

En el marco del avance de la investigación, expertos informáticos llevarán a cabo un peritaje técnico sobre los dos teléfonos iPhone, las dos tables iPad y las dos computadores que pertenecían a la víctima y al femicida, para que se pueda analizar el contenido de los dispositivos.

Cabe mencionar que después de darle un disparo en la cabeza a la mujer, Neuss se quitó la vida y falleció finalmente en el Hospital Austral