Pullaro, tajante sobre Vicentín: “Santa Fe no es un Estado comunista”

El gobernador Maximiliano Pullaro rechazó de forma contundente una posible intervención estatal en la empresa Vicentín, actualmente en crisis judicial. Aseguró que la Provincia no asumirá el control de firmas privadas, aunque garantizó el acompañamiento a los trabajadores.

Santa Fe08 de abril de 2025LORENA ACOSTALORENA ACOSTA
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En declaraciones realizadas tras una actividad oficial en la ciudad de Rosario, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, se refirió a la crítica situación que atraviesa la empresa agroexportadora Vicentín y fue enfático al descartar una eventual intervención estatal para rescatarla. “Esto no es un Estado comunista, donde el Estado o el gobierno tiene que intervenir cuando quiebra una empresa”, sostuvo el mandatario provincial, dejando clara la postura del Ejecutivo santafesino.

La afirmación del gobernador llega en un contexto complejo para la firma radicada en el norte santafesino, luego de que la Justicia anulara el acuerdo que la empresa había alcanzado con sus acreedores, reabriendo el proceso de concurso preventivo. La medida reactivó la incertidumbre en torno al futuro de las plantas de Avellaneda y Ricardone, lo que motivó la consulta a Pullaro sobre un posible salvataje estatal.

Si bien el gobernador fue categórico al rechazar esa alternativa, también expresó su compromiso con los trabajadores y sus familias. “Vamos a estar al lado para que ninguna familia la pase mal o que realmente sufra”, aseguró, recordando que el Gobierno provincial ya ha intervenido en situaciones críticas, como los recortes en partidas alimentarias y de medicamentos dispuestos por Nación.

Pullaro estableció una diferencia clara entre asistencia social y salvataje empresarial: “No se puede hacer el gobierno cargo de la empresa o de cada una de las empresas que quiebran”, enfatizó.

Además, el mandatario cuestionó el manejo político que —según su visión— contribuyó al estado actual del proceso judicial: “Recordemos que desde la Provincia en un momento se intentó intervenir la empresa y desde el Gobierno nacional se la intentó expropiar. Un trámite judicial que debería estar resuelto hace tres años y medio, hoy sigue trabado por las intromisiones del poder político”.

En este sentido, subrayó la necesidad de respetar los procesos judiciales más allá de cualquier posicionamiento político. “Vamos a respetar lo que resolvió la Justicia de la provincia de Santa Fe, nos guste o no nos guste”, concluyó Pullaro, marcando un límite claro en el rol del Estado frente a las empresas privadas en crisis.

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