Toyota desacelera los aumentos: subas menores a las previstas tras la presión del Gobierno

En el marco de una creciente tensión entre el Gobierno nacional y las principales automotrices, Toyota Argentina sorprendió al aplicar una suba menor a la esperada en los precios de sus vehículos durante mayo. Se preveía un incremento promedio del 2,73%, pero finalmente fue del 1,4%, tras la intervención pública del ministro de Economía, Luis Caputo.

La empresa con sede en Zárate, Buenos Aires, ajustó su lista oficial de precios, que quedó configurada de la siguiente manera:

• Toyota Yaris XS 5P CVT: de $24.552.000 en abril a $24.822.000 en mayo.
• Toyota Corolla XLi CVT: de $31.087.000 a $31.553.000.
• Toyota Corolla Cross XLi CVT: de $39.228.000 a $39.816.000.
• Toyota Hilux DX CS 4x2: de $39.906.000 a $40.405.000.
• Toyota SW4 SRX: de $69.792.000 a $71.188.000.
   

Este movimiento se da en medio de lo que ya se denomina como “la guerra de Caputo con las automotrices”. La disputa se originó a partir de la filtración de un aumento del 3,5% en los vehículos del grupo Stellantis (Peugeot, Fiat, Citroën, entre otros), lo que desató una fuerte respuesta del titular del Palacio de Hacienda.

“No creo que sea así. Si fuera cierto, sería un cambio en la relación de confianza construida con esta industria”, sostuvo Caputo al ser consultado por la suba. Además, lanzó una advertencia: “Si se rompe esa confianza, nosotros usaremos nuestras herramientas para defender a los consumidores”.

Este nuevo escenario marca un cambio de postura por parte del Gobierno nacional, que hasta ahora había mantenido una relación dialoguista con el sector. Caputo, en su cruzada contra los aumentos generalizados, ya había celebrado semanas atrás que cadenas de supermercados rechazaran listas de precios con subas por parte de empresas de alimentos.

Ahora, la ofensiva oficial se traslada al rubro automotor, considerado estratégico por su peso en la industria nacional y por su impacto directo en el consumo y la inflación.