El anuncio del cierre del INADI fue realizado por Manuel Adorni, portavoz del gobierno de Milei, quien afirmó que el instituto "no sirve para nada" y es utilizado como una herramienta de la política para favorecer a ciertos grupos. Adorni destacó que esta medida es parte de un plan más amplio de desmantelamiento de instituciones consideradas ineficientes o ligadas a la politiquería.

El dirigente neonazi Alejandro Biondini expresó su apoyo al cierre del INADI, argumentando que el instituto había sido utilizado para reprimir el nacionalismo y limitar la libertad de expresión. La designación de María de los Ángeles Quiroga como interventora para llevar a cabo el cierre del INADI fue anunciada simultáneamente con la decisión gubernamental.

Adorni enfatizó que el gobierno de Milei no seguirá financiando instituciones que considera inútiles o que son utilizadas para fines políticos, y señaló que se tomarán medidas similares con otros organismos gubernamentales. Aunque reconoció que el proceso de cierre puede enfrentar obstáculos burocráticos, Adorni aseguró que el gobierno está comprometido con su ejecución.