En un hito histórico para la economía argentina, el superávit primario del mes de enero llegó a los 2 billones de pesos, marcando el primer saldo favorable en más de una década. Este logro, anunciado por el ministro de Economía, Luis Caputo, representa un cambio significativo en la política fiscal del país.

El superávit financiero, tras el pago de deudas por un monto de medio billón de pesos, también fue motivo de celebración. Este resultado, inédito desde agosto de 2012, refleja un giro positivo en las finanzas públicas argentinas.

El presidente Javier Milei expresó su satisfacción ante esta noticia, destacando la importancia de alcanzar el objetivo de déficit cero. Sus palabras fueron recibidas con optimismo por el mercado financiero y los bonistas, quienes continúan vigilando de cerca la capacidad de Argentina para cumplir con sus obligaciones de deuda.

Los datos revelados por el Sector Público Nacional muestran un superávit financiero de 518.408 millones de pesos en enero, derivado tanto del superávit primario como del pago de intereses de la deuda pública. Este logro se ve reflejado en un aumento del 256,7% en los ingresos totales del SPN, impulsado por el desempeño del comercio exterior y la actividad económica interna.

El crecimiento en la recaudación tributaria, especialmente en los derechos de exportación e importación, así como en el Impuesto PAIS, contribuyó significativamente a este resultado. Además, los ingresos por concepto de IVA y Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social experimentaron incrementos notables, reflejando una recuperación económica en varios sectores.

Sin embargo, las erogaciones primarias del Sector Público Nacional también aumentaron, especialmente en prestaciones de la Seguridad Social y transferencias corrientes al sector privado y público. A pesar de estos gastos, el superávit alcanzado en enero marca un paso importante hacia la estabilidad fiscal y el cumplimiento de compromisos financieros del país.

En resumen, el superávit primario y financiero logrado en enero representa un hito significativo en el camino hacia una economía más sólida y sostenible para Argentina.