La estatua del Venadito, ubicada en plaza San Martín, en la intersección de Moreno e Hipólito Yrigoyen de Venado Tuerto, sufrió un nuevo ataque vandálico. En esta oportunidad, le cortaron los cuernos. El hecho se registró en las últimas horas y se cuenta con registros fílmicos, ya que a pocos metros hay una cámara de seguridad del sistema de videovigilancia municipal.

Esta no es la primera vez que este monumento, que simboliza una de las leyendas populares más pintorescas de la historia de la fundación de Venado Tuerto, sufre alguna mutilación; incluso hace un tiempo se lo trasladó a dicho sector de la plaza principal de la ciudad, con mayor iluminación, desde su localización original en otro punto más inseguro del espacio verde.

Consultadas fuentes municipales, aseguraron que ya se había radicado la denuncia y estaban trabajando en busca de dar con los responsables del nuevo hecho de vandalismo en la plaza mayor. En este sentido, trascendió que se captaron imágenes de dos individuos jóvenes, presumiblemente menores de edad, en actitud sospechosa en las cercanías del Venadito, para que las fuerzas policiales puedan avanzar en la investigación. Además, en las primeras horas de la tarde de este martes, se supo que desde la central de monitoreo seguían buscando imágenes.

Cabe recordar que, como consecuencia de un ataque semejante, el Venadito permaneció varios años sin parte de la cornamenta, la cual fue restaurada por el propio creador de la obra, el artista Raúl Bertolini, en 2017, previo a la celebración del 133° aniversario de la fundación. “Se ha reparado el Venadito de la plaza, lo hicimos con el artista original y estamos muy contentos, porque era algo que teníamos pendiente desde hace tiempo”, manifestó el actual concejal y entonces subsecretario de Educación y Cultura municipal, Sebastián Roma.

Bertolini, nacido el 29 de noviembre de 1935 y designado Ciudadano Notable en 2014, falleció en 2018, dejando como valioso legado varias obras emblemáticas en Venado Tuerto, entre ellas el Venadito.

Los orígenes
La emblemática figura del Venadito, en tamaño natural, fue realizada en bronce, y se localiza en la plaza San Martín, en la intersección de calles Moreno e Hipólito Yrigoyen.

El escultor local Raúl Bertolini fue convocado por el Rotary Club de Venado Tuerto para realizar la obra con motivo del Centenario de la ciudad.

El Venadito fue emplazado a nivel de piso, entre el Monumento al General San Martín y el Monumento a Don Eduardo Casey, a mitad de camino, en 1984. Años más tarde, para evitar el vandalismo, decidieron elevarlo, previa restauración, colocándolo sobre un capitel, direccionado a la calle Moreno.

Aunque hay varias leyendas, la “oficial”, que circula desde los primeros tiempos de la fundación de Venado Tuerto, hace referencia a un venado de las pampas, que herido por los indios en uno de sus ojos, buscaba refugio en el fortín, anunciando la llegada del malón.