La inflación se come hasta el asado y la parrillada se vuelve un lujo

La inflación de febrero, según el INDEC, marcó un 6.6%, un número preocupante que mantiene su modo alcista en un contexto donde la inflación interanual llegó al 102.5%. Como medida de esta situación, desde la Cámara de Matarifes y abastecedores (Camya) informaron este lunes que la cantidad de carne que se podía comprar para un asado en 2020, 2021, 2022 y ahora 2023.

Durante el mes de febrero, los valores de los distintos cortes de parrilla se incrementaron un 30% en promedio. Desde el sector aseguraron que este salto se debe a una recomposición, porque durante seis meses los precios no fueron modificados.  

En 2021, con 604 pesos podía comprarse algo más de un kilo y medio de carne y ya en 2022 apenas un poco más de un kilo. Pero el dato más llamativo surge de febrero de este año, donde apenas pueden comprarse 350 gramos de este producto con ese monto de dinero. Con mil pesos se puede en algunas carnicerías llegar a los 700 gramos.  

Cabe señalar que el ítem que más subió el mes pasado fue Alimentos y bebidas no alcohólicas que se disparó 9,8%, principalmente afectado por la fuerte alza de precios en los cortes de carnes y los productos lácteos.