El Concejo Municipal de Malabrigo no sesiona hace más de un año, más precisamente desde 2019.
 
Desde el 10 de diciembre de 2019 las autoridades electos no llegan a un acuerdo para decidir quien preside el recinto para iniciar la sesión preparatoria.

En las elecciones de aquel año se renovaron la mitad de las bancas y fueron electos Ainalén Bugnon y María Zorzón del Partido Justicialista (PJ) y el concejal Marcos Colignon de la Unión Cívica Radical (UCR), que todavía no asumieron, a su vez tampoco cobran su sueldo como concejales.

Asimismo, los que en 2019 debían dejar su cargo, siguen perteneciendo al Concejo Municipal, que son Loreley Grill y Falvia Nardín de la UCR y Fernando Bertschi del PJ.

En cuanto a la falta de acuerdo, resulta que el 10 de diciembre de 2019 finalizaron su mandato el presidente del Concejo Municipal, Efraín Silvestre y el vicepresidente primero, Luis Carlos Nardín, ambos del PJ. En reemplazo de ellos debía estar el vicepresidente segundo Roberto Sponton de la UCR, pero este fue electo para intendente, por lo cual no asumió en el Concejo Municipal.

En ese sentido, el problema reside en que la UCR propone a Nardín como presidenta por los artículos 29 y 30 del Reglamente Interno, mientras que desde el PJ sostienen que por el cambio de bancas se debe aplicar el artículo 8 del Reglamento Interno, que marca que se debe designar al concejal de mayor edad para presidir la sesión de constitución, que es Berstchi. Al ser tres bancas del PJ y tres de la UCR los votos están empatados hace un año y un mes, y por tal motivo, todavía no hay solución alguna.

El bloque de concejales del PJ acudió a la Asesoría Jurídica de Santa Fe para que resuelva la situación que tiene en vilo a toda una ciudad. Pese a que le dio la razón al PJ, desde la UCR rechazan esa resolución porque argumentan que el Concejo Municipal es un organo autárquico.

Sobre la contrapropuesta de la UCR para que durante seis meses la presidencia sea del PJ y otros seis meses de la UCR, en diálogo con UNO Santa Fe, Bugnon consideró: "Es muy tirada de los pelos. Para nosotros la solución es la de sentarnos todos juntos en una mesa de diálogo pero junto a personas que conozcan las leyes. Porque sino llegamos a propuestas muy alocadas que van en contra del ordenamiento jurídico. Queremos hacerlo de manera clara, legal y ordenada. No puede quedar como antecedente una ridiculez cuando existen normas y reglas que como concejales tenemos que constatar nosotros mismos".