El presidente de la Cámara de Diputados provincial, Miguel Lifschitz, convocó a sesión extraordinaria para dar tratamiento a la ley de necesidad pública para el miércoles próximo.

La convocatoria se enmarca en el nuevo escenario que generó la pandemia de coronavirus: la contención de la enfermedad desplazó al resto de los temas de la agenda pública santafesina.

Sin embargo, el proyecto necesidad pública volvió al debate, en medio de los puentes que se restablecieron entre Lifschitz y el gobernador Omar Perotti.

Después de algo más de tres meses de tensiones, el oficialismo y la oposición buscan tallar un acuerdo que les permita un proyecto de consenso.

"Queremos dejar abiertos los espacios de diálogos para el trabajo conjunto de acá en adelante", dijo una fuente calificada del oficialismo. En ese contexto, la convocatoria es una señal de que la Cámara baja busca darle herramientas al gobierno con la decisión de alcanzar acuerdos.

 
 
La conversación que mantuvo el martes a la noche el gobernador Omar Perotti con Lifschitz podría abrir una nueva etapa entre los protagonistas principales de la política santafesina que, entre otras cuestiones, habilite la aprobación de la necesidad pública.

Los puntos conflictivos siguen siendo los mismos desde diciembre: el monto y los usos del endeudamiento, las facultades delegadas al Ejecutivo y la asistencia a municipios y comunas.

No obstante, con el cambio de coyuntura podría aparecer un texto que deje al menos satisfechas a todas las partes.

En este sentido, el presidente del bloque de la UCR en Diputados, Maximiliano Pullaro, planteó ayer a una radio santafesina: "Estamos avanzando en la ley de necesidad pública y la crisis nos obliga a tomar decisiones. De hecho hay voluntad política para llegar a un monto de otorgamiento de deuda más cercana a la que pide el gobierno. No habrá facultades delegadas".