El Sportivo Miramar Misiones, apodado Cebrita y Mil Rayitas, fue fundado el 25 de junio de 1980, en Montevideo. En 1986 tuvo su momento de gloria: fue campeón y logró el ascenso a Primera. Pero hoy vive un presente complicado: en 2018 descendió a la Segunda B Nacional, la Tercera categoría, e incluso en junio de este año hasta debió dejar de competir en esa categoría por no poder afrontar sus grandes deudas. En julio, se realizó una Asamblea General en la que el entonces presidente, Edgardo Del Forno, puso su cargo a disposición: fue aceptado por la Asamblea y se nombró una Comisión Directiva Provisoria integrada por nueve socios. Bueno, el último martes, tras conformarse una lista de unidad para sacar al Cebrita de la peor crisis en su historia hubo elecciones en la sede social. Fue proclamado presidente Alfredo Ottonello, un histórico dirigente que encabezaba la lista de la unidad. El tema fue que, como no tenían urna, debieron improvisar. Y metieron los votos en una caja de pack de vinos. Espectacular.