Radicales marchan por rutas deterioradas y crecen las acusaciones cruzadas con los libertarios

Este sábado 2 de agosto, dirigentes del radicalismo santafesino convocan a una marcha en la intersección de las rutas nacionales 8 y 33, en Venado Tuerto, con el objetivo de reclamar por el mal estado de las rutas y exigir al gobierno nacional la reactivación de obras viales claves para el sur de Santa Fe.

La movilización se enmarca en una estrategia de visibilización que busca denunciar el supuesto abandono de la infraestructura vial nacional por parte de las autoridades federales. Según los organizadores, los tramos afectados generan riesgos para la seguridad vial y perjuicios económicos para la región productiva.

En respuesta, referentes de La Libertad Avanza acusaron al oficialismo provincial de montar “una campaña de desinformación sistemática” y de ignorar que el tramo de la Ruta 33 entre Rosario y Buenos Aires ya forma parte de la Etapa II de la Red Federal de Concesiones, actualmente en proceso de licitación.

Además, cuestionaron que la provincia haya asumido una deuda de mil millones de dólares para financiar obras públicas cuya ejecución —denuncian— podría favorecer a un reducido grupo de empresas vinculadas políticamente al gobierno santafesino. “Son firmas cuyos propietarios aportaron a campañas y financiaron actos partidarios”, señalaron.

Este nuevo episodio refleja la creciente tensión entre sectores del radicalismo y el espacio libertario, que en 2023 compartieron parte del electorado dentro del frente Unidos. Las aspiraciones presidenciales del actual gobernador profundizan el distanciamiento con el gobierno nacional.

Mientras tanto, la comunidad del sur santafesino sigue esperando soluciones concretas para una red vial que muestra un evidente deterioro.