El mercado duda de la sostenibilidad del ajuste del dólar oficial al 1% mensual

El mercado cambiario local atraviesa un período de fuerte volatilidad, donde la incertidumbre respecto al futuro del tipo de cambio oficial y la reciente intervención de Luis Caputo, ministro de Economía, ha generado más dudas entre los inversores. A pesar de la implementación del ajuste del dólar oficial a un ritmo del 1% mensual, muchos actores del mercado no creen que este esquema se mantenga por mucho tiempo. En las últimas jornadas, los futuros del dólar experimentaron incrementos notables, lo que refleja la creciente expectativa de una aceleración del tipo de cambio.

En un contexto donde la brecha cambiaria ya roza el 20%, la rápida subida de los dólares financieros, que pasaron de $1.220 a $1.300 en solo unos días, ha llamado la atención. A pesar de esta presión, el Banco Central no intervino de manera significativa, lo que sorprendió a los inversores. La falta de acciones claras del gobierno frente a la demanda de dólares financieros y la ausencia de precisiones sobre el acuerdo con el FMI han agudizado el nerviosismo.

Caputo, en sus declaraciones más recientes, reconoció que aún no está claro cómo continuará el esquema cambiario luego del acuerdo con el FMI, lo que ha generado especulaciones y un clima de incertidumbre. Además, el ministro indicó que el monto del préstamo de dicho organismo aún no ha sido definido. Esta falta de certezas ha sido un factor clave en el incremento de los futuros del dólar, que han mostrado un alza considerable para los próximos meses.

El comportamiento del mercado también refleja que muchos inversores ya descuentan que el tipo de cambio oficial no podrá continuar ajustándose al 1% mensual durante un largo período. Esto se ve reflejado en el aumento de los futuros de dólar, que ya muestran un salto significativo para finales de marzo y una expectativa de un ajuste del 30% para fin de año.

La situación actual ha provocado un retroceso en la confianza de los mercados, con exportadores que prefieren retrasar la liquidación de divisas y empresas que se apuran a importar ante la expectativa de una devaluación. Este desajuste se refleja en las ventas de divisas por parte del Banco Central, que ha tenido que intervenir con fuertes sumas de dólares para intentar estabilizar el mercado.

Las miradas están ahora puestas en las próximas decisiones del FMI y en las exigencias que el organismo pondrá sobre la mesa para la economía argentina, especialmente en relación a la flexibilidad cambiaria y la posible salida del cepo cambiario hacia fin de año.