Bullrich se distancia de Macri y del PRO en medio de tensiones políticas

Bullrich se aleja de Macri y del PRO en un fuerte cruce político
En un giro político significativo, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, marcó un quiebre definitivo con el expresidente Mauricio Macri y con su propio pasado en el PRO. A través de redes sociales, la funcionaria del gobierno de Javier Milei criticó duramente la gestión de seguridad en la Ciudad de Buenos Aires y la falta de infraestructura para alojar detenidos, en medio de un conflicto con el Ejecutivo porteño.

Con este posicionamiento, Bullrich no solo se distancia de Macri, sino que también descarta cualquier posibilidad de volver a competir en el ámbito porteño, un territorio que históricamente representó su base política. Su alineación con Milei la consolida como una de las principales figuras del oficialismo libertario, dejando atrás su etapa como referente del PRO.

Un distanciamiento anunciado
El enfrentamiento entre Bullrich y Macri no es nuevo. Desde la derrota de Juntos por el Cambio en 2023, las diferencias entre ambos se hicieron cada vez más evidentes. Si bien Bullrich logró imponerse en la interna de JxC frente a Horacio Rodríguez Larreta, su desempeño en las elecciones generales la dejó fuera del balotaje, lo que debilitó su liderazgo dentro del espacio.

Tras la llegada de Milei al poder, Bullrich optó por aceptar el Ministerio de Seguridad, un cargo que ya había ocupado entre 2015 y 2019 durante la presidencia de Macri. Sin embargo, a diferencia de aquella etapa, en la que respondía a la conducción del expresidente, esta vez Bullrich se muestra completamente alineada con las políticas de seguridad del gobierno libertario.

El cruce con Macri en redes sociales solo confirma lo que en la política ya se especulaba: Bullrich no volverá al PRO y su vínculo con el exmandatario es prácticamente inexistente.

Una carrera política ligada a la Ciudad de Buenos Aires.
Desde hace más de 30 años, Patricia Bullrich construyó su carrera en la Ciudad de Buenos Aires. Fue diputada nacional en dos períodos (1993-1997 y 2007-2015) y candidata a jefa de Gobierno en 2003, cuando obtuvo el 9,72% de los votos. Su papel en la oposición creció durante los gobiernos kirchneristas, lo que le permitió consolidarse como un referente de la centroderecha en el distrito porteño.

En 2015, con la victoria de Macri, asumió como ministra de Seguridad, liderando una gestión marcada por una fuerte impronta en el combate al narcotráfico y la política de mano dura. Su intención de ser presidenta en 2023 la llevó a romper con Rodríguez Larreta dentro de Juntos por el Cambio, y aunque ganó la interna, no logró llegar a la segunda vuelta.

Ahora, su alineación con Milei la deja en una nueva etapa política, en la que su rol como ministra cobra mayor peso y su relación con el PRO parece haber llegado a su punto final.