¿Por qué este verano hay menos mosquitos y qué esperar tras las lluvias?

Este verano, muchos argentinos han notado una menor cantidad de mosquitos en comparación con años anteriores. Según expertos, esto se debe principalmente a la reducción de lluvias, que afecta especialmente a especies como el Aedes albifasciatus, conocido como "mosquito de inundación". Sin embargo, el Aedes aegypti, principal vector del dengue, continúa con niveles habituales de actividad, lo que mantiene la preocupación por posibles brotes de enfermedades.

La doctora Sylvia Fisher, del Instituto de Ecología, Genética y Evolución de Buenos Aires, explicó que la disminución de los Aedes albifasciatus está relacionada con la falta de charcos y anegamientos generados por lluvias. Por otro lado, el Aedes aegypti no depende exclusivamente del agua acumulada en el ambiente, ya que utiliza recipientes llenos por humanos para reproducirse, incluso en periodos de sequía.

En 2023, Argentina enfrentó su peor epidemia de dengue, con 419 muertes confirmadas. Este año, las autoridades sanitarias refuerzan las campañas de prevención para evitar una nueva crisis. Entre las principales recomendaciones se incluyen limpiar recipientes que acumulen agua, desechar objetos en desuso y mantener canaletas destapadas.

Según Gabriel Battistella, subsecretario del Ministerio de Salud porteño, las ovitrampas instaladas en Buenos Aires muestran niveles constantes de positividad para el Aedes aegypti. Se espera que, con el regreso de las lluvias, aumente su actividad y, con ella, el riesgo de transmisión de enfermedades.

Los especialistas recuerdan que la prevención sigue siendo la herramienta más efectiva contra el dengue. Acciones simples, como vaciar recipientes y limpiar con frecuencia patios y jardines, pueden marcar la diferencia en la lucha contra estos insectos.