La víctima es un hombre de nacionalidad colombiana que desde hace tiempo residía en Venado Tuerto. En la tarde de ayer se había radicado denuncia por su desaparición, ya que su hermana había recibido una llamada extorsiva en la que los secuestradores le exigían un millón de pesos como rescate. La mujer en principio no hizo caso a la extorsión, pensando que uno de los tantos engaños telefónicos, pero luego con el paso del tiempo y al ver que su hermano no aparecía decidió realizar la denuncia correspondiente.

Mientras tanto, personal del Comando Radioeléctrico que se encontraba patrullando en zona cercana al camino a San Eduardo detuvo un motociclista que se trasladaba con un acompañante, en actitud evasiva y al reclamarle los papeles del vehículo constataron que el mismo era robado. Así, posteriormente ya en la sede del Comando detectaron que dicha moto pertenecía a la persona con pedido de paradero.

Con estos datos, dieron parte al fiscal Iván Raposo quien pidió dos allanamientos a las viviendas de los motociclistas, ambas ubicadas en la zona de Dimmer y entre España y Almafuerte. En el primer allanamiento encontraron una escopeta y el segundo una pistola calibre 32. Por supuesto, los tres moradores de las viviendas fueron detenidos, y uno de ellos culminó confesando el asesinato.

De este modo, en dicho testimonio relató que a la víctima lo mataron asfixiándolo y luego lo arrojaron en un camino rural. Hacía la zona indicada concurrió una delegación policial y se encontraron con el cuerpo calcinado de la persona buscada.

Los tres detenidos serán indagados durante la mañana de hoy y el caso posteriormente pasaría a la Justicia Federal, ya que la causa sería caratulada como secuestro extorsivo seguido de muerte.