En los primeros nueve meses del año, en Rosario se planificaron tres de cada cuatro asesinatos que se cometieron. El dato se desprende de un informe del Observatorio de Seguridad, integrado por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación (MPA), cuyo documento agrega, además, que uno de cada tres crímenes fueron por encargo.

Asimismo, en el departamento Rosario se identificó que "una de cada diez víctimas no eran las destinatarias principales de los ataques". Es decir, personas que fueron asesinadas cuando no eran el objetivo de quien gatilló el arma de fuego.

En tanto, se detectaron 21 asesinatos "por error" en la provincia de Santa Fe entre enero y septiembre de este año, una cifra similar a la del año pasado. De ese número, tres fueron en el departamento La Capital y el resto en Rosario. Otra de las características relevantes de la estadística oficial es que 629 personas fueron heridas de arma de fuego en el departamento Rosario en los primeros nueve meses de este año. Es decir, un promedio de dos personas baleadas por día.

De los 629 heridos de arma de fuego, 553 son víctimas de Rosario, 51 en Villa Gobernador Gálvez, 11 en Pérez, 8 en Granadero Baigorria, 2 en Piñero, 2 en Ibarlucea, 1 en Roldán y en Arroyo Seco.

El informe del Observatorio de Seguridad remarca que entre enero y septiembre de este año hubo 178 homicidios dolosos en el departamento Rosario, una cifra más alta que la registrada en los años anteriores para el mismo período. Ese número, en un contexto de alta violencia, motivó entre otras cuestiones la llegada de 575 gendarmes de refuerzo a la provincia, de los cuales un gran porcentaje se quedará en la ciudad para tareas de inteligencia y prevención.

Del análisis de los crímenes ocurridos se desprende que de los 178 homicidios, la mayoría de las víctimas tenían entre 15 y 34 años; y que 17 de las personas asesinadas fueron mujeres. Se estima también, en base a las investigaciones en curso, que el dos por ciento de los casos fueron homicidios en ocasión de robo.

La conclusión del Observatorio de Seguridad es que la tercera parte de las víctimas en Rosario tenían entre 25 y 34 años al momento de su muerte; tres de cada diez tenían entre 15 y 24 años; y casi dos de cada diez entre 35 y 44 años.

Otro dato destacado del documento es que nueve de cada diez asesinatos en Rosario fueron cometidos con armas de fuego, una participación superior en relación a años anteriores (años analizados 2014-2021). Y el 70 por ciento de los casos tuvieron lugar en la vía pública.

Con respecto a la planificación de los crímenes hay otro dato sugerente: de 146 casos de los que se cuentan con todos los detalles, más de la mitad se dieron a una distancia menor de cinco cuadras de los domicilios de las víctimas. Supone esta situación que la persona agredida es emboscada al salir o volver a su casa, o cuando está en inmediaciones.

La característica que grafica la "industria del sicariato" en Rosario es que uno de cada tres homicidios se hicieron por encargo. Esto significa que el autor material desconocería a la víctima y habría actuado por pedido de otra persona a cambio de dinero. Los lugares más calientes de Rosario, de acuerdo a las estadísticas criminales, son los barrios Bella Vista, Villa Banana y Godoy (zona oeste); Tablada, Las Flores y la Granada (sur/sudoeste); Ludueña, Larrea y Empalme Graneros (noroeste).