Diez hombres y una mujer mayores de edad fueron imputados hoy por la fiscal María Gabriela Arri en el marco de una investigación por el ocultamiento, adulteración y comercialización de teléfonos celulares robados en la ciudad de Santa Fe. La atribución delictiva fue realizada por la funcionaria del MPA ante el juez Sergio Carraro en una audiencia llevada a cabo esta mañana en los tribunales de la capital provincial.

            “Las personas a las que imputamos fueron detenidas el miércoles de esta semana en 23 procedimientos que se llevaron a cabo de manera simultánea en la ciudad de Santa Fe”, informó la fiscal. “Esta mañana les atribuimos el delito de encubrimiento agravado”, precisó la funcionaria del MPA y aclaró que “la calificante es porque realizaban la actividad ilícita con habitualidad, con ánimo de lucro y sin contar con la habilitación correspondiente para hacerlo”.

Investigación

            “Para concretar la detención de los imputados realizamos un trabajo de más de dos meses de investigación que incluyó el cruce de información proveniente de al menos cuatro fuentes”, subrayó la fiscal.

La funcionaria del MPA enumeró “las denuncias realizadas en la policía por los santafesinos a los que les sustrajeron algún teléfono celular; informes solicitados a la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (Dajudeco) acerca de IMEI, número y titularidad de los dispositivos; listados actualizados de comercios habilitados por la municipalidad para la venta de celulares; y trabajo de campo realizado por personal del departamento Complejas 1 de la Agencia de Investigación Criminal (AIC)”.

            “Con todos esos datos, ordenamos la realización de tres allanamientos y 20 inspecciones judiciales en la ciudad de Santa Fe”, puntualizó la fiscal. En el marco de esas diligencias, fueron detenidas 16 personas, cinco de las cuales recuperaron su libertad y las otras 11 son las que fueron imputadas esta mañana”, agregó.

Además, Arri valoró que “se secuestraron 449 teléfonos celulares, 7 notebook y 3 pen drive”. También subrayó que “fueron encontradas 26 dispositivos llamados ‘box’ o ‘máquinas de flasheo’, las cuales se usaban ilegalmente para el formateo e instalación del software del teléfono y para la liberación de IMEI de los celulares”.

“Los inmuebles en los que se realizaron los allanamientos y las inspecciones judiciales funcionaban como locales comerciales –muchos de ellos sin habilitación– de venta y reparación de los teléfonos celulares”, señaló la fiscal. “En esos lugares, y a sabiendas de su procedencia ilícita, los imputados tenían los dispositivos a los que les modificaban el IMEI con el fin de percibir una suma de dinero”.

      Por último, la fiscal informó que “la municipalidad de la ciudad de Santa Fe se contactó con la Fiscalía para solicitar información que le permita avanzar en actuaciones administrativas relacionadas a los locales comerciales inspeccionados y allanados”.

Prisión preventiva

            En función de lo resuelto esta mañana, la audiencia de medidas cautelares se llevará a cabo el próximo domingo en horario a confirmar por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ). La fiscal Arri adelantó que solicitará la prisión preventiva de siete de los 11 imputados.

¿Qué es el IMEI de un teléfono celular?

            El IMEI (del inglés, International Mobile Equipment Identify) es un código de identificación que traen de fábrica todos los teléfonos celulares. Se trata de una combinación de números que es transmitida por el dispositivo cada vez que se conecta a la red y que permite identificarlo de forma exclusiva.

Propietarios

            La fiscal Arri adelantó que “desde la Fiscalía Regional se trabajará para concretar la devolución de los teléfonos a sus propietarios”. En tal sentido, manifestó que “se iniciarán tareas que implicarán controlar todos y cada uno de los dispositivos, para luego contactar a sus dueños y devolvérselos”.

Oficina de Prensa y Difusión MPA.