El Ministerio de Educación de la provincia comunicó anoche que durante la semana que viene las clases seguirán siendo no presenciales en Santa Fe. Según el texto oficial, se dispuso que entre el lunes 31 de mayo y el viernes 4 de julio "permanezcan suspendidas todas las actividades escolares presenciales en el ámbito escolar".

"Las instituciones darán continuidad al vínculo pedagógico en el modo de enseñanza en la distancia implementando los recursos que conocen para este formato: aulas virtuales (siempre que sea posible), utilización de la telefonía celular para el envío de actividades y propuestas, entrega de materiales impresos y guías de trabajo", señala el escrito.

La medida se adoptó ante "el agravamiento de los indicadores sanitarios en el territorio provincial" y como una forma de que el sistema educativo contribuya a la "restricción de circulación para las personas".

Paralelamente, desde el Ministerio le solicitaron a las escuelas que esta semana entregan módulos alimentarios, que organicen al personal en equipos para hacer propicia esa oportunidad para distribuir materiales pedagógicos.

El Gobierno consintió, finalmente, al pedido que realizó ayer el gremio que nuclea a los docentes de escuelas públicas, Amsafe, que exigió mantener el esquema de restricciones teniendo en cuenta la grave situación epidemiológica que atraviesa la provincia y consideró que, con los actuales índices de la pandemia, no era "posible" regresar a las clases presenciales.