El empresario rosarino, Leonardo Peiti, obtuvo ayer una morigeración en la prisión que se encontraba cumpliendo de forma efectiva en el marco de una de las causas en las que se investiga el juego clandestino en la provincia de Santa Fe.

Peiti se encuentra imputado en cuatro causas que se tramitan en distintos juzgados. La principal es la que se lleva adelante en Rosario, donde declaró bajo la modalidad de arrepentido y reconoció el pago de coimas a los ex fiscales Serjal y Ponce Asahad.

A fines de marzo, el empresario de 47 años fue detenido por disposición del juez Bottero de Rafaela acusado de ser jefe de una asociación ilícita en la región. Luego de esta disposición, los abogados que patrocinan a Peiti lo recusaron.

La nueva jueza hizo lugar al planteo de los letrados y, tras analizar un informe de la junta médica que trató al detenido, aceptó que continúe el proceso fuera de la cárcel, bajo un tratamiento psicológico y psiquiátrico que realizará en un instituto de Rosario.

De esta manera, Peiti contará con custodia policial y seguirá vinculado a la investigación, aunque lo hará fuera de la unidad penitenciaria. Esta medida generó una dura oposición por parte de los fiscales Loyola y Lema que son quienes llevan adelante la investigación en su contra.