Mientras la estabilidad cambiaria permitió al Banco Central comprar casi u$s 600 millones en los primeros días de marzo, a nivel internacional los mercados muestran síntomas inquietantes.
Las acciones en Wall Street registraron ayer una nueva jornada de caídas luego de que el presidente de la Reserva Federal de EEUU, Jerome Powell, admitiera que espera una mayor inflación para 2021.

 
El índice industrial Dow Jones cayó 1,1%, el ampliado S&P 500 cedió 1,3% y el tecnológico Nasdaq se contrajo 2,1%. La jornada comenzó con un clima pesimista ya que arrastraba no sólo las dudas de los operadores de la víspera sino que se sumaron los débiles datos de empleo, ya que subieron levemente los pedidos por subsidios a la desocupación.

Al mismo tiempo, la decisión de los países petroleros nucleados en la “Opep plus” de prolongar los recortes de los bombeos, disparó los precios del crudo y dejó el terreno fértil para una suba en los precios de la energía.

El alza de los commodities se reflejó también en Chicago, donde el precio de la soja cerró con subas, impulsado por temores a complicaciones con la oferta a corto plazo a nivel mundial. Cotizó a u$s 518,27 la tonelada. A los retrasos en la cosecha brasileña, se le sumó ayer el dato aportado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda) que aseguró que dicho país ya comercializó el 98,3% de su saldo exportable y las incertidumbre respecto a la cosecha argentina.

Asimismo, “en el marco de importantes cambios de política por parte de la administración Biden , en el país norteamericano se esperan millonarias inversiones para incrementar la capacidad de crushing,”, indicó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

En un contexto en que se esperan mayores presiones inflacionarias, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, un indicador que refleja los temores de los inversores sobre la economía estadounidense, subió bruscamente.

El titular de la FED decía en teleconferencia que “la inflación probablemente se recuperará en los próximos meses pero el aumento será temporal y no será suficiente para que altere sus políticas de tasas de interés”.

Pero los comentarios no lograron aliviar las preocupaciones de los inversores, de que un crecimiento más fuerte conducirá a una mayor inflación. Los rendimientos de los bonos subieron en las últimas semanas, por el nerviosismo de los inversores. En Europa, las Bolsas volvieron a mostrar leves bajas.

Mercado argentino

La plaza accionaria local se desacopló de ese malestar y terminó con una suba de 1%. El S&P Merval respondió a las ganancias de YPF del 5,8%, que reaccionaron a la nueva calificación otorgada el miércoles por Standard & Poor’s. En el terreno cambiario, el Banco Central cerró la jornada con compras por cerca de u$s 185 millones y acumula u$s 585 millones desde que comenzó marzo. De esta forma, la autoridad monetaria compró en los primeros cuatro días del mes casi la misma cantidad que en todo febrero.

Esas compras, sin embargo, no se reflejan en un aumento de reservas debido a que vendió una parte de esos dólares contra bonos en el mercado bursátil, con lo que también ayudó a mantener controlada la cotización del “Dólar MEP”.El Central compra dólares a $ 90 y los vende en el mercado bursátil a $ 140 contra bonos. Esta operatoria ayuda a esterilizar pesos en forma más económica que emitiendo Leliqs o pases.