Por: Oscar A Canavese 18 de febrero de 2019

Renata Palarich, campeona Internacional de acrotelas.

En categoría Elite es por tercer año consecutivo campeona nacional TAAT y, recientemente, campeona Internacional.

En la categoría profesional en lira fue donde participó por primera vez Renata Palarich, que compitió en el ámbito regional y se hizo con el primer puesto.

A partir de ahí arranco un sueño... Poder ser campeona Mundial.



Hoy, Renata Palarich, en categoría Elite, es por tercer año consecutivo campeona nacional de TAAT y ¡se llevo el puntaje técnico más alto de todo el torneo!. Para Renata siempre fue un deseo competir internacionalmente.

Como sabemos, dentro de lo deportivo, cuesta mucho que por parte de la Provincia o el Estado se cubran los gastos de, al menos, los viáticos que necesita una deportista para poder viajar, en este caso a Italia. Por suerte para ella, Norberto Gizzi y Lisandro Enrico, colaboraron en que pueda cumplir su sueño.

Además, el sábado 12 de enero, se realizo un bono colaborativo para el pro viaje hacia al campeonato mundial de telas, donde la gente pudo involucrarse de poder hacer realidad este sueño tan esperado que el año anterior no  había podido concretar.

Renata, señala su profesora Jesica Muñoz, "En Argentina, en todo lo que es acroaéreo, es una de las referentes más importantes con solo 13 años, además es de Villa Cañás. Y, no es porque sea mi alumna, o porque sea de acá, pero es una nena que se conoce y se admira en este ambiente, es increible". Además, señala la profe, "Tiene un ángel en el escenario, que cuando se ve, produce otra cosa. Eso se refleja en sus 7 medallas de primeros puestos, en los mejores puntajes técnicos y artísticos de todo el torneo, que es una competencia que trasciende en todas las edades".

Esa magia que transmite Renata en su país, también lo pudo demostrar en Italia, donde no solo se llevo el  primer puesto de la competencia, también ganó el premio a la mejor performance de todo el torneo.

No solo conquisto el mejor premio que una deportista pueda tener, también sus corazones, lo que la llevo a que tenga que dar clases y seminarios en Roma.

Esperamos su vuelta el 25, ¡Felicitaciones Reni!