La Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), encabezada por Héctor Daer, ha convocado a un paro nacional que ha paralizado los servicios de salud en todo el país. La medida de fuerza se lleva a cabo en demanda de un aumento salarial que pueda contrarrestar la creciente inflación y evitar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores del sector. La falta de acuerdo en las negociaciones paritarias y lo que consideran "intransigencia" por parte de las cámaras empresariales han motivado esta acción gremial.

Hasta el momento, solo están operativas las guardias médicas para atender emergencias, mientras que consultorios, hospitales, laboratorios y centros de atención a personas mayores o con discapacidad permanecen cerrados. La decisión de llevar a cabo un paro nacional de 24 horas ha generado un impacto significativo en el sistema de salud, evidenciando la tensión existente entre los trabajadores y los empleadores del sector.

FATSA ha expresado su preocupación por la situación financiera del sector, pero insiste en que no pueden permitir que los bajos salarios de los trabajadores continúen financiando a los empresarios. En un comunicado, el sindicato reitera su compromiso con la defensa de los derechos laborales y la necesidad de una actualización salarial acorde a las condiciones económicas actuales.